PMI manufacturero de la zona euro septiembre 43,4 vs 44,0 esperado. PMI de servicios 48,4 vs 47,7 esperado
PMI compuesto de S&P Global en la zona euro septiembre 47,1 vs 46,5 consenso.

La economía del sector privado de la zona euro se mantuvo en territorio de contracción al cierre del tercer trimestre del año puesto que un desvanecimiento de la demanda provocó otro declive de la actividad total. La reducción de la actividad total fue una vez más encabezada por la producción del sector manufacturero, sin embargo, en el sector servicios también se observó una reducción de la actividad empresarial, la segunda mensual consecutiva.
Pese a que las firmas siguieron aumentando sus plantillas en septiembre, la tasa de creación de empleo fue solo marginal debido al evidente exceso de capacidad y a las perspectivas más pesimistas desde el último trimestre de 2022. A pesar del débil entorno de demanda, los costes siguieron aumentando con intensidad, y de hecho la tasa de inflación se aceleró frente a la observada en agosto. Por otra parte, los precios cobrados aumentaron en su menor medida en más de dos años y medio debido al escaso poder de fijación de precios.
Actividad total y demanda
El Flash del Índice PMI Compuesto de la Actividad Total de la Zona Euro de HCOB ajustado estacionalmente, que se basa en aproximadamente el 85 % del total habitual de respuestas a la encuesta, se situó en 47.1 en septiembre, subiendo ligeramente de la lectura de 46.7 de agosto, pero de todos modos señaló un sólido declive mensual de la actividad total al cierre del tercer trimestre. La actividad total ha caído por cuarto mes consecutivo. Por segundo mes consecutivo, los declives se observaron en los dos sectores estudiados puesto que la actividad del sector servicios volvió a reducirse. No obstante, el ritmo de contracción de la actividad en el sector servicios se atenuó ligeramente frente al de agosto y fue mucho más moderado que el observado para la producción del sector manufacturero. El declive de la producción manufacturera se mantuvo sin cambios con respecto al rápido ritmo observado el mes anterior. Con excepción de un breve periodo de crecimiento durante el primer trimestre del año, la producción manufacturera de la zona euro ha disminuido constantemente desde mediados de 2022. Un factor fundamental de la última reducción de la actividad total fue un nuevo deterioro de la demanda del consumidor, tal y como lo subraya el cuarto declive mensual consecutivo de los nuevos pedidos. De hecho, la caída registrada en septiembre fue marcada y la más pronunciada desde noviembre de 2020. Los nuevos pedidos recibidos en el sector manufacturero volvieron a contraerse rápidamente, pero la aceleración de la tasa de declive se centró en el sector servicios, cuya caída de los nuevos pedidos fue la más intensa desde la pandemia. En efecto, si no se consideran los meses afectados por las restricciones relacionadas con la COVID-19, la caída de los nuevos pedidos en el sector servicios fue la de mayor magnitud desde mayo de 2013. Los nuevos pedidos de exportación se redujeron aún más rápidamente que los nuevos pedidos en total en septiembre.
Empleo, capacidad operativa y optimismo
Las agudas caídas de los nuevos pedidos hicieron que las firmas a menudo se concentraran en los pedidos pendientes para mantener los niveles de actividad. En consecuencia, los pedidos pendientes se redujeron de nuevo intensamente en septiembre, y la última erosión de los pedidos por completar fue la más pronunciada desde junio de 2020. Las empresas de la zona euro también indicaron un descenso de la confianza en las perspectivas para los próximos doce meses al final del tercer trimestre. Pese a que, en general, las firmas siguieron previendo un aumento de la actividad durante los próximos doce meses, el sentimiento decayó hasta su mínima desde noviembre de 2022. El optimismo se desvaneció en los dos sectores estudiados, y el sentimiento reinante en el sector industrial apenas se mantuvo en territorio positivo. El exceso de capacidad en combinación con la reducción de la confianza en las perspectivas futuras hizo que las empresas de nuevo adoptaran cautela con respecto a la contratación. Aunque el empleo aumentó marginalmente en septiembre, el ritmo de creación de empleo fue conjuntamente el segundo más lento en la secuencia actual de treinta y dos meses de crecimiento. Se registró la cuarta reducción mensual de las plantillas manufactureras mientras que el empleo en el sector servicios indicó un ligero aumento. Además de recortar las plantillas, los fabricantes de la zona euro también redujeron intensamente su actividad de compra y disminuyeron sus existencias de materias primas y de productos terminados. La caída de los stocks de productos terminados fue la más marcada de los dos últimos años. La reducida demanda de insumos contribuyó a que los proveedores pudiesen acelerar las entregas, por lo que los plazos de espera se acortaron por octavo mes consecutivo. La tasa de aceleración de las entregas fue intensa, pero la menos pronunciada desde febrero pasado.
Precios
La inflación manifestó tendencias divergentes en septiembre ya que un alza más rápida de los costes contrastó con un ritmo más atenuado de la inflación de los precios cobrados. Los costes de los insumos aumentaron al ritmo más acelerado de los últimos cuatro meses, aunque lo hicieron a un ritmo muy por debajo del promedio observado en los tres últimos años. La inflación fue impulsada por el sector servicios, en el que los precios aumentaron intensamente debido al incremento de los costes salariales y de los precios del combustible. Por otra parte, el sector manufacturero registró la séptima caída mensual consecutiva de los precios de compra. A pesar de la aceleración del ritmo de inflación de los costes, el debilitamiento del entorno de demanda llevó a las empresas a aumentar sus precios de venta en menor escala que en agosto. De hecho, el último aumento de las tarifas cobradas fue solo modesto y el más ligero desde febrero de 2021. En el sector manufacturero, los precios de venta cayeron a un ritmo marcado y acelerado, mientras que en el sector servicios, la inflación de los precios cobrados se atenuó hasta su mínima de veinticinco meses.
Tendencias nacionales
Las dos principales economías de la zona euro (Alemania y Francia) fueron los principales responsables de la desaceleración general de la actividad total en septiembre. En Alemania, la actividad total cayó por tercer mes consecutivo y a un ritmo sólido, que de todos modos fue ligeramente más lento que el observado en la encuesta del mes anterior. La producción manufacturera alemana se redujo a su ritmo más rápido desde la ola inicial de la pandemia de la COVID-19, mientras que la actividad en el sector servicios se redujo ligeramente. La contracción en Francia fue más dura y la actividad total se redujo en su máxima proporción desde noviembre de 2020. Con excepción de lo ocurrido durante los meses afectados por la pandemia, la reducción fue la más aguda en más de una década. Los ritmos de declive se aceleraron tanto en el sector manufacturero como en el de servicios. En el resto de la zona euro, la actividad total se mantuvo prácticamente estable en septiembre. Aunque la producción manufacturera se redujo por sexto mes consecutivo, la caída fue la menos intensa desde abril pasado. Al mismo tiempo, la actividad del sector servicios aumentó ligeramente, y en mayor medida que en agosto.