MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
Un 55 por ciento de mujeres consideran que sus hábitos nutricionales han cambiado o cambiaron durante el embarazo o la lactancia, siendo el cambio más habitual (70% de estas) el hecho de intentar comer de forma más saludable, según los resultados extraídos de una encuesta hecha por la Federación Española de Sociedades de alimentación, Nutrición y Dietética (FESNAD) sobre los conocimiento en nutrición durante el embarazo y la lactancia.
La alimentación de la madre antes de la gestación juega un papel fundamental para favorecer el mejor estado de salud materna y del futuro bebé, por lo que una buena alimentación es "un factor preventivo", ha afirmado el doctor de la Sociedad Española de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica, Juanjo Díaz.
Por ello, la FESNAD junto a la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) han celebrado este jueves la XIV edición del Día Nacional de la Nutrición bajo el lema 'En el embarazo y la lactancia comer bien es el mejor Te Quiero'.
Además, los resultados de la encuesta han revelado que un 52 por ciento de las encuestadas han tomado algún tipo de complemento alimenticio. En este sentido 8 de cada 10 han tomado ácido fólico, seguido del hierro (53%) y polivitamínicos y minerales (41%).
Por otro lado, han destacado de forma positiva los bueno hábitos nutricionales que llevan a cabo estas mujeres a la hora de cocinar puesto que más de las tres cuartas partes aseguran que utilizan aceite de oliva virgen para cocinar o aliñar los alimentos, y un 67 por ciento ha afirmado que cocina a la plancha de forma habitual. En cuanto al endulzante. el 54 por ciento de las mujeres utiliza azúcar; mientras que un 20 por ciento utiliza edulcorantes.
ENGORDAR MENOS DE 16 KILOS
En lo relativo al peso, los especialistas recomiendan que durante el embarazo la mujer tenga un aumento de peso entre 11,5 y 16 kilos, siempre y cuando se trate de una mujer con normopeso. En este sentido, la mayor parte de las mujeres encuestadas han señalado que consumen la misma cantidad de alimentos que sin estar embarazadas o lactando, exceptuando la bollería industrial, los embutidos y fiambres, alimentos en los que más de la mitad de las encuestadas aseguran reducir la cantidad consumida.
"El aumento de peso debe estar relacionado con el estado ponderal preconcepcional", ha asegurado la vocal de la Sociedad Española Nutrición Comunitaria, la doctora Victoria Arija.
Además, en la encuesta también se han incluido algunas preguntas sobre alimentos concretos y su idoneidad o no es estas etapas. En este sentido, un 85 por ciento de las mujeres considera que el pescado crudo no es recomendable; mientras que entre el 70 y el 80 por ciento de ella tampoco cree recomendable consumir carne cruda como jamón serrano o carpaccio de ternera durante el embarazo.
Por último, la vocal asesora de la Estrategia NAOS, ha querido recordar que la prevalencia de la obesidad se ha triplicado en Europa, y sigue en aumento, sobre todo en niños, por lo que ha considerado imprescindible que las mujeres durante el embarazo se cuiden y coman sano pues esto puede repercutir de alguna forma al bebé.
Los expertos recomiendan que durante el embarazo y la lactancia se deben evitar el consumo de especies de pescado con contenidos de mercurio más altos como el pez espada, tiburón, lucio y en el caso del atún, el atún rojo.