• El Papa tomó cartas en el asunto
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El escándalo de las agresiones sexuales a menores perpetradas por un grupo de curas de Granada está bajo investigación policial a raíz de la denuncia de un joven que destapó esta trama. Una sobrecogedora carta de esta víctima al Papa Francisco conmovió al Santo Padre hasta tal punto que decidió intervenir en el asunto.

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Publica El País fragmentos de la misiva por la que se conoce que el denunciante es un profesor universitario de 24 años y miembro numerario del Opus Dei. “Las prácticas más frecuentes iban desde masajes a masturbaciones y besos en la boca”, relata. El remitente reconoce que no había denunciado antes para “no desgastar a la Iglesia” y pide al Papa que “no permanezca impasible”. “Es inadmisible que estas personas estén haciendo daño a niños y niñas”, denuncia.

El Joven explica que por su vida han pasado “nueve sacerdotes” que le han “causado mucho daño” a él y, al menos, a “otras cuatro personas”. Da detalles sobre estos religiosos sobre quienes el Arzobispado de Granada abrió una investigación canónica, tras la intervención papal. Tres de ellos fueron apartados de sus oficios religiosos.

El Papa pidió disculpas al joven

Explica el medio que tras esta carta el denunciante recibió dos llamadas del Papa, una en la que le pidió disculpas "por este gravísimo pecado y gravísimo delito” y otra posterior asegurándole que se llegaría hasta el final y mostrando su descontento porque solo tres curas hubiesen sido apartados del ejercicio.

Ahora, este asunto lo lleva un juez y hasta el momento habría implicados varios párrocos y laicos granadinos y se han contabilizado al menos cuatro víctimas. Es inminente que cite a declarar a los cuatro principales partícipes.

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