Durante el juicio al consejo de administración a la ex cúpula de Spanair, el que fuera director general, Ferran Soriano, ha responsabilizado al Govern de la Generalitat de la quiebra de la compañía, ya que retiró la financiación antes de que encontraran un nuevo socio industrial.

Spanair mantenía conversaciones con Qatar Airways y el grupo chino HNA en el momento de su cierre, pero, según Soriano, la Generalitat dejó de apoyar económicamente a la aerolínea a través de la empresa de promoción industrial Avançsa. Al parecer, el Ejecutivo catalán se había comprometido a invertir en la compañía para crear un ‘hub’ de vuelos internacionales.

El juicio contra los ex dirigentes de Spanair ha arrancado este martes. La Fiscalía pide 72 millones de euros por el retraso de casi cinco meses en la presentación del concurso de acreedores, pese a conocer que la sociedad era insolvente.

Los hechos se remontan al 27 de enero de 2012, cuando Spanair cesó su actividad dejando en tierra a casi 23.000 pasajeros y tres días después, la compañía presentó concurso voluntario de acreedores con un pasivo de 474 millones y anunció un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para 2.075 trabajadores.

N.J.

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