• Prestar atención a los pequeños detalles es muy importante
  • Siempre hay que mostrar una faceta positiva
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Una persona llega a una entrevista de trabajo con mucho en juego. Hay un tiempo muy limitado para demostrar una serie de cualidades que reflejen que se es el mejor candidato para el puesto ofertado, por lo que hay que prestar una atención importante a los errores que se cometan, pues cualquier desliz puede ser determinante.

Los errores que hay que evitar en una entrevista de trabajo:

1- La falta de entusiasmo:

Hay que mostrar un interés grande en conseguir el puesto. Que los entrevistadores vean el entusiasmo que genera el puesto, así como la motivación necesaria. Esto no quiere decir que haya que exagerar o mentir.

2- Evitar críticas a empleados anteriores:

Hay que explicar el cambio de trabajo con argumentos positivos. Hablar mal de compañeros anteriores puede hacer pensar a la entrevista contratante que llegará el día en el que también hables mal de esta firma.

3- Preparar la entrevista:

Hay que conocer al detalle la actividad y estructura de la empresa. Esto demuestra interés y puede convertirse en el aspecto que diferencie a un candidato del resto de personas que aspiran al puesto de trabajo.

4- Centrarse en puestos que se adapten a las habilidades:

Cuando se busca un empleo no se puede disparar a todo. Hay que centrarse en las opciones más reales, y éstas son las que más se ajustan a las habilidades del candidato. Este detalle permite explicar mejor el interés por el puesto o demostrar la capacidad de realizar las funciones asignadas.

5- Marcar objetivos:

Hay que poner sobre las mesas una serie de objetivos y metas que demuestren que se tiene un interés real en el puesto ofertado. Esto refleja motivación y una visión de futuro positiva.

6- Demostrar las capacidades:

No hay que ceñirse a lo que la empresa busca. Es recomendable aportar valor cualitativo, ofrecer más de lo que se busca con habilidades que la firma contratante no esperaba.

7- La falta de cualificación:

Muchas veces se aplica a puestos de trabajo que no se corresponden del todo con las habilidades que un empleado posee. En este caso, hay que evitar mentir sobre la cualificación porque tarde o temprano la verdad saldrá a la luz.

8- Mostrar los puntos fuertes:

La empresa contratante tiene que encontrar en el candidato a una persona capaz de superar los miedos y debilidades, que hay margen para crecer ante las adversidades y complicaciones.

9- Atención especial a los detalles:

Muchas veces los detalles determinan a qué candidato se selecciona para el puesto. Estos detalles se trasladan a todos los aspectos, currículo, vestimenta, posturas, formar de hablar...

10- La importancia de ir bien vestido:

En relación con el punto anterior, la forma de vestir desprende mucha información. La vestimenta es determinante en la primera impresión que obtiene la empresa del candidato. Estudiar la actividad de la firma ayuda a elegir una vestimenta que sea coherente con la actividad de la compañía.

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