• La broma ha trascendido y se suma ahora una petición del PP para que el alto cargo de Podemos sea inhabilitado
  • 'Pablo Echenique, entona una letra con evidentes connotaciones machistas mientras es jaleado por sus compañeros de partido' asegura Orós
Pablo Echenique, podemos

"Chúpame la minga, Dominga, que vengo de Francia. Chúpame la minga, Dominga, que tiene sustancia", esta fue la jota elegida por el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, para animar una cena de varios cargos del partido de Podemos, entre los que se encontraba Pablo Iglesias y que termina por ser vitoreado como "presidente, presidente".

En una cena privada de altos cargos del partido tras un acto de precampaña de las elecciones autonómicas del 24M donde concurrió como candidato a la Presidencia de Aragón, Echenique se arrancaba a cantar una jota un tanto 'descuidada', recoge Huffington Post

Lo que en un primer momento iba a ser una broma privada, fruto de las risas, ha trascendido y se suma ahora una petición del PP para que el alto cargo de Podemos sea inhabilitado.

La página web del Partido Popular de Aragón recoge las declaraciones de la portavoz del Grupo Parlamentario, Marián Orós que dice así:

“Espero” –dice Orós- “que esto no sea su forma de dignificar la política, ni de acercar la política a los ciudadanos”.

"La portavoz adjunta del Grupo Parlamentario Popular, Marián Orós ha salido al paso del vídeo publicado por un medio de comunicación en el que se ve al Secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, entonar una letra con evidentes connotaciones machistas mientras es jaleado por sus compañeros de partido.

Orós asegura sentir “vergüenza” como ciudadana al ver cómo aquellos que han repartido carnets de la igualdad disfrutan –ellos y ellas- con semejantes chanzas. “Espero” –dice Orós- “que esto no sea su forma de dignificar la política, ni de acercar la política a los ciudadanos”.

Marián Orós también cree que una vez conocidos episodios como este o los hechos ya publicados sobre las irregularidades en la contratación de su asistente personal inhabilitan políticamente a Echenique para ostentar cualquier cargo institucional. “Está en las antípodas lo que los ciudadanos necesitan y esperan de sus representantes públicos” –concluye Orós."

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