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José Luis Bayo, candidato a presidir el PPJOSÉ LUIS BAYO

La Comisión Organizadora del próximo congreso nacional del PP ha encontrado errores en los avales presentados por uno de los precandidatos a la sucesión de Mariano Rajoy, José Luis Bayo, por lo que ha decidido concederle 24 horas para que los subsane y pueda seguir adelante en el proceso.

Así lo ha explicado en rueda de prensa el presidente de la comisión, Luis de Grandes, que ha confirmado que el resto de aspirantes son ya candidatos formales: María Dolores de Cospedal, Soraya Sáenz de Santamaría, Pablo Casado, José Manuel García Margallo, José Ramón García-Hernández y Elio Cabanes.

El expresidente de Nuevas Generaciones del PP en la Comunidad Valenciana y candidato a presidir el PP, José Luis Bayo, tendrá que corregir los problemas con varios avales para alcanzar los 100 que se exigen como mínimo para poder ser candidato.

Luis de Grandes ha explicado que la comisión "no puede ser flexible" porque el proceso podría entonces ser "susceptible de impugnaciones o recursos" y los plazos son ya muy ajustados: las votaciones de los afiliados tendrán lugar el 5 de julio y el congreso se celebrará los días 20 y 21 de ese mes. "Estamos siendo cuidadosos", ha añadido.

NO HABRÁ DEBATE

En el marco de su comparecencia, De Grandes ha anunciado también que el PP pagará los gastos de los candidatos en su campaña a la Presidencia del partido. Tendrán a su disposición tanto recursos económicos como materiales -"el que necesite coche, tendrá coche; el que necesite chófer, tendrá chófer", ha llegado a decir-, aunque para acceder a la financiación del partido sus gastos deberán estar "perfectamente tasados y regulados". Además, los candidatos podrán usar también las sedes de la formación si así lo desean, aunque ha insistido en que todo tendrá que estar debidamente justificado. "Tenemos que ser muy estrictos con el Tribunal de Cuentas", ha señalado

Por último, sobre si habrá o no un debate entre todos los aspirantes a la sucesión de Rajoy, el presidente de la comisión lo ha descartado. Tal y como ha explicado, después de haber consultado a expertos y de haber hablado con los propios candidatos, el PP ha llegado a la conclusión de que "un 'debate a siete' es un debate prácticamente imposible, es un debate malo". Y lo es porque no sería realmente un debate, sino "una sucesión de intervenciones en las que hay que tasar tiempo, materias...", y eso no sirve para nada, ha afirmado, confirmando que han "desistido" de esta idea.

Aunque, eso sí, ha dicho que eso no significa que antes del congreso del 20 y 21 de julio, cuando haya sólo dos candidatos (una vez hayan votado los militantes del PP), no pueda celebrarse un debate.

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