• La más expuesta al mercado español es Caixabank, aunque sus participaciones engordan 7.990 millones de euros en el parqué
  • El traslado de oficinas Grifols a Irlanda deja a la farmacéutica fuera del comité de apoyo a la Agencia del Medicamento en Barcelona
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Artur Mas y Carles Puigdemont, expresidente y presidente de la Generalitat.GENERALITAT DE CATALUNYA

Banco Sabadell, CaixaBank, Cellnex, Abertis y Grifols, cinco de las diez empresas que más revalorizan en el año en el Ibex 35 tienen su sede social en Cataluña. Estas compañías con 'adn catalán' no se están viendo afectadas por la agitación política que se vive en su comunidad autónoma de cara a la celebración del referéndum del 1 de octubre que pretende llevar a cabo la Generalitat.

Pero pese al tira y afloja que mantienen el Gobierno central y el Ejecutivo liderado por Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, los grandes inversores no parecen estar preocupados por la consulta ni por las decisiones que están tomando tanto los políticos de una y otra parte. Así lo corrobora el informe de Barclays llamado ‘España: la política no debe estropear la fiesta del crecimiento’, en el que reconocen no estar "demasiado preocupados por el referéndum catalán".

Además los analistas del banco británico también señalan que "si el referéndum de Cataluña se celebra el 1 de octubre, y suponiendo que gane una mayoría pro-independencia, pensamos que no tendrá ninguna implicación política mayor que un cambio muy probable en el gobierno local catalán". Barclays tiene en cuenta que el 70% de los diputados en el Congreso -PP, PSOE y C’s- no aprobaría nunca un referéndum unilateral de independencia, al considerarlo fuera de la Constitución.

La propia Generalitat apuntó en mayo en la documentación que envía cada seis meses a los inversores internacionales con información sobre la situación macroeconómica y financiera de sus cuentas que los datos están basados “en el contexto actual y en el marco legal existente”, aunque dejaban la puerta abierta a “escenarios institucionales alternativos”. La encuesta del Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat conocida este viernes refleja que el 49,4% de los catalanes es contrario a la ruptura y un 41,1% favorable, por lo que el apoyo a la secesión cae a niveles de 2012.

De momento, el mercado no ve ningún tipo de incertidumbre en las grandes empresas catalanas, incluidos sus dos grandes bancos, CaixaBank y Sabadell que lideran las ganancias en el Ibex 35 este año. El banco que preside Josep Oliu acumula una revalorización del 36,5% este año y desde julio de 2016 sube un 45%, sacudiéndose toda la presión vivida por el Brexit por su exposición al mercado británico.

Los ingresos del Sabadell provienen en un 22% del Reino Unido, donde está presente desde 1986. El 74% de su facturación depende de sus clientes nacionales y un 3% de sus negocio en Estados Unidos.

Las participaciones que mantienen las tres entidades ‘marca Caixa’ engordan 7.990 millones de euros en lo que va de año

CaixaBank, por su parte, sube un 33,4% en el año. Sin embargo, el ‘gran’ banco catalán, controlado en un 40% por el holding Criteria Caixa y con otro 40% por la Fundación Bancaria La Caixa, se está ‘haciendo de oro’ este año en bolsa con sus participaciones industriales y las que también mantienen tanto el holding como la fundación, estas dos últimas presididas por Isidre Fainé.

En conjunto, las participaciones que mantienen las tres entidades ‘marca Caixa’ engordan 7.990 millones de euros en lo que va de año, gracias a las posiciones en el accionariado de Gas Natural, Cellnex, Abertis, Repsol, Telefónica, Prisa y Deoleo, según los cálculos de Bolsamanía entre la capitalización actual y la del cierre de 2016. CaixaBank, a diferencia del Sabadell, mantiene prácticamente todo su negocio en España y sólo llegan un 0,2% de sus ingresos de Polonia y un 0,1% de Marruecos.

De las cinco compañías catalanas destacadas en el selectivo español, la que mejor aspecto bursátil presenta es Cellnex, operador de infraestructuras de telecomunicaciones controlado en un 34% por Abertis y en un 5% por la Fundación La Caixa. El 65% de los analistas del consenso que recoge FactSet recomienda comprar sus acciones, un 26% mantenerlas y sólo un 9% apuesta por su venta. Además los analistas que siguen la cotización del título, estiman que tiene un potencial de revalorización del 9% desde los 18,58 euros actuales. En lo que va de año se revaloriza un 35,7%.

ABERTIS, EL OBJETO DE DESEO DEL IBEX

Si hay una compañía que está animando el mercado este año es, sin duda, Abertis. La oferta pública de adquisición (OPA) lanzada por la italiana Atlantia por 16.340 millones de euros, ha animado en las últimas semanas también a otras compañías como la semipública Aena, JP Morgan en compañía de Globalvia y ACS a lanzar señales para poder hacerse con el líder mundial en la gestión de autopistas con 8.600 kilómetros en cartera. El movimiento de Aena parece descartado por el Gobierno que controla el 51% de sus acciones, a través de Enaire, mientras que el intento del banco de inversión tampoco tiene visos de prosperar y Florentino Pérez puede que sea quien deshoje finalmente la margarita.

El gigante de las autopistas, que es una de las joyas de la corona de las participaciones de CaixaBank, tiene la gran ventaja ante una posible tempestad política en Cataluña de que sus negocios están diversificados geográficamente entre catorce países. Así el 33,7% de sus ingresos llega desde Francia, su segundo mercado es España, y especialmente las autopistas que circunscriben Barcelona, y cuenta también con una presencia destacada en Brasil, Chile, Reino Unido, Estados Unidos, Argentina y Colombia.

Los títulos de Abertis marcan ahora mismo incluso un precio más alto que el ofrecido por Atlantia en su opa, 16,50 euros frente a los 16,65 euros de este viernes, que representa una subida del 25% en lo que va de 2017. El precio de las acciones debe empujar a la italiana a redoblar su esfuerzo en la compra de la gestora de autopistas si es que se quiere llevar ‘el gato al agua’ ante la competencia que le está saliendo.

GRIFOLS, CATALANA PERO CON ACENTO INGLÉS

Grifols es una de las pocas empresas del Ibex 35 que presume orgullosa del apellido de la saga familiar fundadora. Con sede en Sant Cugat del Vallés (Barcelona), trasladó parte sus oficinas a Dublín en 2015 en busca de una tributación por sociedades del 12,5% frente al 26% que se paga en España. Además, también anunció una inversión de 85 millones de euros en una nueva planta de biociencia, la división de la compañía farmacéutica que más factura.

A Víctor Grifols, presidente no ejecutivo, se le ha vinculado al independentismo catalán, incluso el empresario llegó a decirle a Artur Mas en 2014 que siguiese “adelante, no se arrugue”. Sin embargo, los movimiento de la compañía en Irlanda no han gustado al Gobierno catalán, que le ha devuelto el dardo envenenado dejándole fuera del comité de apoyo a la candidatura de Barcelona como sede de la Agencia Europea del Medicamento, mientras que sí están otras farmacéuticas como Almirall, Esteve, Ferrer o Farmaindustria (Novartis).

Grifols, además de su negocio irlandés, cuenta con una presencia destacada en Estados Unidos y dos de cada tres euros que ingresa dependen de ese mercado. Esta misma semana, la revalorización del euro frente al dólar en máximos desde agosto de 2015 ha hecho estragos en la cotización de sus títulos, que pese a todo resisten con una revalorización cercana al 25% en el año. La bolsa resiste hasta el momento a la política.

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