• También ha explicado que no hay relación con el Estado Islámico de momento aunque no se ha cerrado la investigación
  • El joven que acometió el tiroteo tenía antecedentes psiquiátricos aunque no policiales
  • Según apuntan varios medios de comunicación su nombre sería el de David S.
MUNICH

En la rueda de prensa ofrecida por la policía alemana ha explicado que nueve de los diez fallecidos en el ataque perpetrado por un joven en Múnich eran adolescentes, entre ellos había menores de edad. El único adulto tenía 45 años. Además, las fuerzas de seguridad han confirmado que no han encontrado ninguna relación del autor de los hechos con el Estado Islámico.

"No hay indicios que relacionen al atacante con el Estado Islámico", ha asegurado el jefe de la Policía de Múnich. Aunque no ha dado datos de los motivos del ataque, sí ha revelado que en el registro realizado en su casa se ha encontrado "rastro de su interés por los ataques en solitarios". Especialmente, artículos de periódicos sobre las actuaciones policiales en casos "de locura", ha confirmado en la rueda de prensa que ha habido durante la mañana del sábado. Según apuntan varios medios de comunicación su nombre sería el de David S.

La policía ha confirmado que tenía grandes problemas mentales y que llegó a estar en tratamiento

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La Policía de la capital bávara también ha descartado que el ataque tenga alguna relación con los refugiados, en relación con el ataque esta semana en un tren regional donde varias personas resultaron heridas con un hacha por un refugiado afgano. "Ni el hecho ni el autor tienen nada que ver con los refugiados", han explicado.

GRAN DISPOSITIVO

Las fuerzas de seguridad llegaron a desplegar 2.300 efectivos en el momento álgido de alerta y este sábado por la mañana alrededor de 800 seguían patrullando la capital bávara, que poco a poco comienza a volver a la normalidad. Los servicios de emergencia recibieron durante la noche más de 4.300 llamadas, según Europa Press.

La Policía ha informado de que un grupo de policías de paisano llegó a disparar contra el tirador en la zona del aparcamiento del centro comercial poco después de que comenzase el ataque, pero no lograron alcanzarle. Finalmente el joven se quitó la vida con un disparo en la cabeza a un kilómetro de distancia.

VIVIÓ Y CRECIÓ EN MÚNICH

Gran parte de los fallecidos que hubo en el comercial Olympia eran jóvenes. Ocho de los nueve muertos tenían entre 14 y 21 años, han confirmado en la rueda de prensa. Tres de ellos eran de orgien kosovares, según confirmó un portavoz policial. La otra sería una mujer de 45 años.

A su vez, las fuerzas del orden han asegurado "que nació y vivió en Múnich", "que fue a la escuela en Múnich" y que contaba con la doble nacionalidad, germano-iraní. El joven se habría quitado la vida disparándose en la cabeza, aunque aún tenía munición para realizar 300 disparos más.

EL JOVEN ATACANTE OBSESIONADO CON LAS MATANZAS EN SOLITARIO

Los medios ya hablan de una identidad. El autor del crimen sería Ali David Sonboly, un joven de 18 años estudiante en la capital bávara. Vivía con sus padres, un taxista iraní y una dependienta, y su hermano en un piso en el humilde barrio muniqués de Maxvorstadt.

En el registro de su habitación los agentes han hallado abundante material que demuestra su interés por las conocidas como matanzas en solitario. En su habitación, Ali coleccionaba recortes de periódico de las actuaciones policiales en casos de este tipo. En la mochila que utilizó en el tiroteo hallaron el libro 'Amok, por qué matan los estudiantes', que trata el conocido síndrome Amok y su relación con los ataques de estudiantes.

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