• La deuda pública escalará hasta el 100,3% del PIB pero el déficit caerá
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Los Presupuestos de la "consolidación". Así se ha referido en varias ocasiones el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, sobre las cuentas que ha confeccionado el Gobierno para 2015. Con un techo de gasto de 129.000 millones, el 55% del montante irán a pensiones, deuda y desempleo. El Ejecutivo prevé subir las pensiones un 0,25% el próximo año (el mínimo establecido por ley) mientras reducirá el gasto en desempleo un 15%.

El Gobierno quiere que los Presupuestos de 2015 sirvan de acicate para consolidar la recuperación económica y mejorar el empleo. Según Montoro, "reconozcámoslo, nadie se esperaba que fueramos a encabezar el crecimiento de la zona euro". El ministro ha recalcado que la reforma fiscal reducirá los impuestos que pagan familias, trabajadores y empresas y ha recordado que "devolverá 9.000 millones de euros a los contribuyentes".

MÁS DINERO PARA PENSIONES, MENOS PARA DESEMPLEO

El 55% del presupuesto proyectado por Hacienda se corresponde a los gastos derivados de desempleo, las pensiones y el el pago de intereses de la deuda.

El Estado dedicará 115.669 millones a pensiones, un 3,2% más

De esta manera, Montoro ha confirmado la subida de un 0,25% las pensiones para el próximo año, en línea con el mínimo que se incluye en la última modificación legal. De esta manera, el Gobierno prevé un gasto de prestaciones contributivas de 115.669,23 millones de euros, un 3,2% más.

En cuanto al pago del subsidio por desempleo, el Ejecutivo atisba una reducción de este montante del 14,9%, en parte por desempleados que agotan su prestación y en parte por la mejora del empleo.

MÁS DEUDA PÚBLICA

A pesar de los esfuerzos de las administraciones para reducir el déficit y la deuda, los cálculos del Gobierno sostienen que el ratio de endeudamiento sobre PIB alcanzará el 100,3% en 2015, el más elevado de la serie histórica.

Además, la quinta congelación salarial de los funcionarios públicos se suma a la congelación del montante que recibe la Casa Real. De esta forma, Felipe VI estrenará trono con la misma asignación que su padre, 7,7 millones de euros, y las Cortes también tendrán la misma asignación, 201,2 millones de euros.

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