• El banco fue sancionado en septiembre del año pasado con 185 millones de dólares
  • Atribuye un impacto negativo de hasta 1.000 millones de dólares al pago de litigios
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El banco estadounidense Wells Fargo obtuvo un beneficio neto atribuido de 4.185 millones de dólares (3.530 millones de euros) en el tercer trimestre de 2017, lo que supone un retroceso del 20% con respecto al mismo periodo del año anterior, según las cuentas publicadas este viernes por la entidad, que atribuye un impacto negativo de hasta 1.000 millones de dólares (843 millones de euros) al pago de litigios.

La entidad asegura que las cuentas del tercer trimestre recogen el impacto de 1.000 millones de dólares de la acumulación de litigios

La cifra de negocio de Wells Fargo entre julio y septiembre alcanzó un total de 21.900 millones de dólares (18.470 millones de euros), un 2% menos que en el periodo equivalente del ejercicio precedente. En concreto, los ingresos trimestrales de la entidad se corresponden a un aumento del 4% de los ingresos netos por intereses, hasta 12.476 millones de dólares (10.521 millones de euros) impulsados por el alza de los tipos de interés; y a una caída de un 9% de los ingresos del margen de intereses, hasta situarse en 9.450 millones de dólares (7.969 millones de euros).

De este modo, en los nueve primeros meses del ejercicio, Wells Fargo obtuvo un beneficio neto atribuido de 14.645 millones de dólares (12.348 millones de euros), lo que implica un retroceso del 5,52% respecto a los 15.501 millones de dólares (13.070 millones de euros) que registró un año antes.

Entre enero y septiembre, los ingresos de la entidad por intereses ascendieron a 37.259 millones de dólares (31.416 millones de euros), un 5% más que los nueve primeros meses de 2016. Al contrario, los ingresos al margen de intereses de Wells Fargo cayeron un 8%, hasta 28.839 millones de dólares (24.317 millones de euros).

En este sentido, el presidente y consejero delegado de Wells Fargo, Tim Sloan, ha explicado que durante el año se han realizado cambios "fundamentales" en la entidad como parte de sus esfuerzos por reconstruir la confianza y crear un mejor banco.

Wells Fargo fue sancionado en septiembre del año pasado con 185 millones de dólares (156 millones de euros) por las malas prácticas detectadas entre 2011 y 2015, cuando se contrataron sin consentimiento de los clientes 1,5 millones de cuentas de depósito y se solicitaron 0,5 millones de tarjetas de crédito, motivo por el que la entidad despidió a 5.300 de sus empleados y que acabó provocando la dimisión este miércoles del consejero delegado.

Asimismo, el directivo ha indicado que Wells Fargo ha continuado invirtiendo en innovación y se ha iniciado, además, en el servicio de solicitudes de hipotecas online y ha puesto en marcha la plataforma para la inversión digital y asesoramiento profesional 'Intuitive Investor'. De igual forma, ha apuntado que la fundación de la entidad estadounidense donó hasta 2.600 millones de dólares (2.191 millones de euros) para ayudar a las zonas devastadas por los huracanes.

Por su parte, el director financiero de Wells Fargo, John Shrewsberry, ha subrayado que las cuentas del tercer trimestre recogen el impacto de 1.000 millones de dólares o 0,20 dólares por acción de la acumulación de litigios, si bien la liquidez y el capital "permanecieron excepcionalmente fuertes".

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