El sindicato convocante y Prosegur no alcanzan un acuerdo
MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
La empresa Proseguir y el sinditaco ATES-SAM han concluido sin acuerdo el acto de mediación y se mantiene, en consecuencia, los paros parciales convocados entre este jueves y el 8 de enero de 2018, en plena fechas navideñas para la plantilla de vigilantes y auxiliares de seguridad del en los controles de acceso al aeropuerto de Barajas.
El portavoz del sindicato Jordi Montejo ha señalado a Europa Press que "salvo milagro" los paros se mantienen para este jueves y recalca que la empresa "sigue en la misma línea" y está "cerrada en banda", como han apreciado en el acto de mediación celebrado hoy en el Instituto Laboral de la Comunidad de Madrid.
Fuentes conocedoras de la reunión han explicado a Europa Press que la empresa ha decidido recurrir esta convocatoria de huelga al entender que es "ilegal" y que se han fijado unos servicios mínimos del 90%.
Las mismas fuentes relatan que el conflicto se remonta desde antes del verano cuando los sindicatos realizan una serie de reivindicaciones y en julio de este año se alcanza un acuerdo en el Instituto Laboral de la Comunidad de Madrid para realizar unas mejoras organizativas que se iban a implantar "progresivamente".
Unido a ello, se acordó en un grupo de trabajo con el Ministerio de Fomento tras el conflicto con los vigilantes del aeropuerto de Barcelona un incremento salarial del 11%, que en el caso de Madrid se añadía un 5%más. Además, a ello se añade un aumento salarial del 2 por ciento con aplicación del convenio colectivo en enero.
Por otro lado, se convocó otra huelga que fue recurrida por Prosegur y que el pasado 11 de diciembre un Juzgado de lo Social de Madrid lo aceptó declarando la huelga "ilegal".
PAROS PARA REIVINDICAR CONDICIONES "DIGNAS"
Las horas de huelga de estos trabajadores serán de 5.30 a 6.30 horas, de 10.30 a 11.30 horas, de 14 a 15 horas y de 19 a 20 horas, han informado el sindicato.
El objetivo de los paros es reivindicar un mejoramiento de las condiciones de trabajo "que les alejen de la precarización y les acerquen a unas condiciones laborales mínimamente dignas".
"Velamos por la seguridad de los pasajeros, pero nadie vela por nuestros derechos, con una alerta 4 cada vez tenemos más responsabilidad y menos calidad en el trabajo, con innumerables auditorías, presión de los mandos y menos salario con el que no llegamos a fin de mes. Con elevado déficit en la formación lo que provoca sanciones o despidos de los trabajadores. Se evalúa por Aena nuestra amabilidad pero no la seguridad que prestamos", señalan.