• La UE podría acudir a la Organización Mundial del Comercio ante una medida "alarmante" y "profundamente injusta"
  • China, Corea del Sur y Japón ya planean medidas que compensen el proteccionismo de Trump
  • El TLCAN no se toca y México y Canadá, lo celebran
malmstrom

Europa no se da por aludida. En los planes de la Unión Europea (UE) no entra la negociación con el presidente Donald Trump para su levantamiento de los aranceles al acero y al aluminio, medida firmada por el líder republicano el pasado jueves, y que simplemente no consideran que deba ser impuesta al bloque europeo. "Europa no es una amenaza para la seguridad interna americana", declaró la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmström, en Bruselas este viernes. "Contamos con ser excluidos", añadió.

Donald Trump firmó el pasado jueves medidas arancelarias en contra de las importaciones de acero (25%) y aluminio (10%) que se produzcan en el país norteamericano. Una decisión que ha sido ampliamente criticada en el Congreso estadounidense, con especulaciones que apuntaban a la intención de bloquear la medida por parte de representantes de ambos bandos, y que catapultó la salida de Gary Cohn, ahora ex Consejero Económico del presidente, de la Administración.

El proteccionismo de Trump tendrá consecuencias. La misma Malström anunciaba el miércoles la intención de la UE de aplicar medidas equivalentes, encareciendo las importaciones de productos americanos como el bourbon, la mantequilla de cacahuete, productos de Harley-Davidson o vaqueros Levi´s. Una decisión que se tomará tras un ataque "alarmante" y "profundamente injusto" por parte de la Administración americana, en opinión de la comisaria europea. Un sentimiento que también han manifestado China y Corea del Sur, aumentando la posibilidad del estallido de una 'guerra comercial'.

"Europa no es una amenaza para la seguridad interna americana. Contamos con ser excluidos", Cecilia Malmström

A pesar de ello, la respuesta no será inmediata. El anuncio del presidente de EEUU no fue "suficientemente claro" según la comisaria, quien reiteró que la respuesta no se producirá hasta que la situación de los aranceles no se clarifique, y se gestione entre todos los Estados miembro y la industria del acero el modo de "reaccionar".

Sin embargo, Malmström recordó la prioridad de la UE de evitar todo tipo de confrontación, siempre confiando en el diálogo como el camino a seguir. "Esperamos recibir la confirmación de que la UE está exenta y así continuar con nuestro diálogo sobre cómo lidiar con el problema", declaraba. "Si esto no se produce, hemos sido muy claros en nuestra opinión" de que esto no se alinea "con la Organización Mundial del Comercio (OMC)" a quién recurriremos probablemente "junto a otros amigos". "Estamos preparando con el resto de Estados miembro una lista de medidas compensativas que podrían entrar en vigencia. Por supuesto esperamos que este no sea el caso, nadie está interesado en llegar a esta situación, pero si lo tenemos que hacer, así se hará", añadía.

EL TRATADO DEL TLCAN NO SE MODIFICA

México y Canadá son por ahora los únicos exentos del proteccionismo de Trump. El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no se toca, decisión celebrada por ambos países. El TLCAN "sigue su curso de manera independiente a esta o cualquier medida de política interna que tome el Gobierno de Estados Unidos", declaraba la secretaría de Economía mexicana.

El Ministerio de Comercio chino consideró el argumento de la seguridad nacional insuficiente para justificar esta medida proteccionista, e insta a la Casa Blanca a retirar los aranceles "lo antes posible" y a atenerse a las normas de la OMC. Además, advertía a Trump de que las consecuencias podrían extenderse a sus propias empresas y consumidores en un conflicto bidireccional.

El ministro de exteriores nipón, Taro Kono, catalogó la decisión de Trump como "lamentable" y anunció que Japón estudiará herramientas para contrarrestar la pérdida. Una relación comercial que supuso en 2017 una venta de 1,78 millones de toneladas de acero por parte del país asiático a Norteamérica.

Del mismo modo, Corea del Sur mostró su intención de acudir a la OMC tras recibir un "golpe importante para las exportaciones surcoreanas de acero a Estados Unidos".

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