- El movimiento proeuropeo 'The Best of Britain' comenzará así una campaña, tratando de promover una segunda ronda del referendum que mantenga a Reino Unido en la UE
La campaña británica a favor de la Unión Europea (UE), 'The Best of Britain', ha recibido una donación de más de 450.000 euros (400.000 libras esterlinas) por parte del multimillonario húngaro George Soros, a través de su fundación 'Open Society Foundation' (OSF). El magnate, que ya manipuló decisiones políticas en el Reino Unido en 1992 durante el "miércoles negro", vuelve a la carga en contra de las decisiones tomadas por el gobierno británico.
La campaña se encuentra dirigida por Mark Malloch-Brown, ex ministro por el partido laborista, y Gina Miller, cofundadora de la firma de inversiones SCM Direct, mujer que llevó la decisión del gobierno ante los tribunales por la activación del artículo 50 del Tratado de Lisboa.
"Nosotros, como millones de personas, creemos que Reino Unido debe liderar Europa, no abandonarla" declaraba Malloc-Brown durante una comparecencia ante los medios. "Trabajamos con activistas, unionistas, políticos y grupos comunes, asegurando que todos tengan voz en este movimiento" dijo el ex ministro.
"Nosotros, como millones de personas, creemos que Reino Unido debe liderar Europa, no abandonarla"
"La fundación de George Soros ha donado, junto con otros donantes mayores, contribuciones significantes a nuestro trabajo. De hecho, a través de su fundación ha contribuido con 400.000 libras. Pero también nuestros pequeños donantes han contribuido en gran manera con su compromiso, por lo que Soros es un gran e importante donante entre muchas otras fuentes", declaraba el presidente del movimiento. Soros en cambio no ha realizado ningún tipo de declaración al respecto.
Con estos fondos, la organización pondrá en marcha una campaña publicitaria, tratando de generar una segunda ronda de votación para mantener a Reino Unido en la Unión. Todos los esfuerzos se centran ahora en continuar debilitando la posición de Theresa May a través de captar primeramente el voto joven, para posteriormente continuar con una campaña tradicional de marketing, según informaba el diario conservador y pro Brexit The Telegraph.
SOROS YA TUMBÓ LA LIBRA EN 1992
En un momento en el que los 'hedge founds' eran practicamente desconocidos, George Soros fue capaz de tumbar al Banco Central Británico aprovechando un error de cálculo por su parte durante los inicios de la integración europea.
En octubre de 1990, el Reino Unido entraba finalmente en el sistema de Tipo Fijo de Cambio o ERM ('Exchange Rate Mechanism') que algunos países europeos desarrollaron con el fin de establecer un tipo de cambio fijo respecto al marco alemán, con una fluctuación del tipo de cambio del -/+6%. Así, la fluctuación ligada al mercado se eliminaba y se establecía una tasa fija con respecto a la moneda germana.
Los primeros resultados de esta medida fueron buenos. Entre 1990 y 1992 la inflación se frenó, los tipos de interés se redujeron y el bajo desempleo marcó cifras históricas. Sin embargo, a finales de 1992, una crisis económica mundial despertó de nuevo la incertidumbre en el país, con una subida del paro del 7,7% al 12,7% en apenas unos meses.
Atada por el sistema ERM, el gobierno británico carecía de la opción de bajar los tipos de interés para combatir la recesión, ya que ello habría supuesto el exceder las bandas de fluctuación establecidas por el acuerdo. El gobierno debía hacer frente a la situación sin la ayuda de los tipos de interés.
Sumado a esta situación crítica, durante el verano de 1992, miembros del Bundesbank aseguraban a la prensa que una devaluación de la libra esterlina frente al franco era prácticamente inevitable dada su situación. Si la bajada de tipos en Alemania no surgía efecto, existía la posibilidad que un par de divisas, entre ellas la británica, corrieran el peligro de tener que abandonar el ERM.
Analizando la situación, a través de su fondo 'Quantum Fund', George Soros llevaba todo el verano apostando cerca de 1.500 millones de dólares a una caída del tipo de cambio de la libra esterlina. Los políticos británicos habían cometido un error aceptando un tipo de cambio tan alto en su entrada al sistema común.
Durante la noche previa a la apertura de los mercados, el Quantum Fund aumentó su posición a favor de la caída de la libra de 1.500 a 10.000 millones de dólares. Con el inicio de la jornada, inversores incrédulos vieron cómo miles de millones de libras estaban siendo vendidas, y su valor caía a niveles cercanos a los tipos de cambio mínimos establecidos en el ERM.
El nivel de venta de la moneda británica se disparó tanto, que ni siquiera el propio Banco Central de Reino Unido fue capaz de subir los tipos de cambio a través de su compra. La única medida posible en aquellos momentos, lo que además supondría un suicidio político debido a la situación del país, era incrementar los tipos. El resultado de su incremento fue inexistente, y apenas unas horas después del inicio del día, Norman Lamont, ministro de economía, anunciaba la salida del Reino Unido del sistema ERM volviendo a la fluctuación libre de su divisa.
