• El aumento se produce por el mayor número de pensionistas y la cuantía más alta que les corresponde
  • El gasto sigue desbocado a pesar de la revalorización de un raquítico 0,25%
ep fatima banezsenado
Fátima Báñez, ministra de Empleo y Seguridad SocialEUROPA PRESS

El gasto en pensiones continúa creciendo a ritmos del 3% anual. De hecho, acumula 13 meses consecutivos de aumentos por encima de esta cota, a pesar de que la revalorización de la nómina de los pensionistas se sitúa en un raquítico 0,25% por ley que les está haciendo perder poder adquisitivo este año.

La nómina de las pensiones alcanzó en mayo los 8.722,5 millones de euros, según las estadísticas publicadas este jueves por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social. La cifra crece un 0,15% respecto a abril y un 3,01% sobre el mismo mes del año anterior. En los cinco primeros meses del año, el desembolso supera los 42.000 millones de euros.

Desde la reforma del sistema llevada a cabo por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2013, las pensiones se han revalorizado cada año un 0,25%, lo que implica una pérdida del poder adquisitivo para los pensionistas en 2017 con la inflación anual en entornos del 2%. Sin embargo, las pensiones medida están aumentando a un ritmo mucho mayor, debido a que los nuevos pensionistas que se incorporan al sistema les corresponden cuantías mayores que en el pasado.

En este sentido, la pensión media de jubilación alcanza los 1.062,31 euros, un 2,03% más que en mayo de 2016. Por su parte, la pensión promedio del sistema contando todos los tipos (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares) es de 919,55 euros, un 1,91% más que en el mismo mes del año anterior. En total, el sistema cuenta con 9.485.660 pensiones contributivas, tras incrementarse el dato en un 1,08% interanual. El grueso corresponde a jubilación, con un total de 5.802.370 pensiones. Por su parte, hay 2.356.753 de viudedad; 945.600, de incapacidad permanente; 340.360, en orfandad; y 40.568, a favor de los familiares.

Lo anterior, unido al envejecimiento progresivo de la población, conforman el cóctel que dispara el gasto en pensiones y cuestionas su sostenibilidad a medio y largo plazo pese al recorte en términos reales -aumento nominal menos IPC-. De hecho, el Gobierno ha presupuestado la mayor cuantía para esta partida de la historia, con 139.647 millones de euros en el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

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