• El cupo se 'paga' por los servicios que la Administración central presta en la comunidad en beneficio de los residentes
  • Rajoy se ha comprometido a devolver 1.400 millones de euros a Euskadi como compensación por lo que dice haber pagado de más desde 2007
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El cupo vasco se ha convertido en el tema 'estrella' de los últimos días. Los partidos han dedicado gran parte de su tiempo a hablar del acuerdo sellado por PP y PNV, y que puede ser la puerta para que los nacionalistas vascos acaben apoyando los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018 que ya prepara el Gobierno de Mariano Rajoy. No hay que olvidar que el compromiso del Ejecutivo central de rebajar el cupo fue clave para conseguir el respaldo de los nacionalistas vascos a los presupuestos de este año, aprobados en mayo.

El País Vasco lleva tiempo reclamando el cambio en el cupo que está a punto de producirse. Considera que ha estado pagando de más al Estado desde 2007

El debate y la votación de esta medida, a la que el Gobierno dio luz verde en plena crisis catalana y que se ha tramitado por vía de urgencia, han tenido lugar este jueves en el Congreso de los Diputados, donde se ha aprobado por 292 votos a favor, 36 en contra y 2 abstenciones. Pero, ¿qué es exactamente el cupo vasco y por qué ha suscitado tanta polémica?. El cupo es la cantidad que el País Vasco envía cada año al Estado por los servicios que la Administración central presta en la comunidad en beneficio de los residentes (defensa, embajadas, infraestructuras…).

El cupo y la forma en que se calcula aparecen recogidos en el Concierto Económico, que es el sistema de financiación propio del País Vasco, en el que se establecen y regulan las relaciones financieras y tributarias entre la región y el Estado. Además, en él se reconoce la potestad de Euskadi para mantener su propio régimen tributario. Precisamente el Concierto también ha sido modificado, para concretar los cambios en el cupo, y se han votadoal mismo tiempo en el hemiciclo.

El País Vasco lleva tiempo reclamando el cambio que finalmente se ha aprobado en la Cámara baja, dado que considera que ha estado pagando de más al Estado desde 2007. Hay que recordar que el Concierto Económico, que reconoce a las Diputaciones Forales la facultad de recaudar sus propios impuestos y que establece el sistema de contribución de las provincias vascas a las arcas estatales, es un derecho reconocido en la Constitución de 1978, donde se recoge la singularidad de los dos territorios forales de España, el vasco y el navarro, y se reconoce este sistema especial.

En el Concierto se establece el cupo, que se calcula cada cinco años y que ha sido motivo de tiranteces entre el Gobierno y Euskadi en los últimos años. Los vascos han reclamado insistentemente una rebaja de la cantidad exigida por el Estado, y por fin ha tenido respuesta por parte del Ejecutivo de Rajoy. El nuevo modelo establecido contempla una rebaja del cálculo del cupo, a lo que hay que añadir el compromiso de devolver, de forma prorrateada, 1.400 millones de euros al País Vasco como compensación por las cantidades que dice haber pagado de más.

¿PAGA DE MÁS O DE MENOS?

Precisamente este punto es uno de los más polémicos. Mientras que Euskadi defiende que el cálculo del cupo le ha perjudicado y que lleva años ingresando a las arcas del Estado más de lo que realmente corresponde, lo cierto es que muchos señalan que en realidad recibe más dinero del que realmente aporta, en torno a 300 millones de euros, y que ahora con la rebaja esa cifra se ampliará. Y la polémica, como no podía ser de otra cosa, está servida. Sobre todo cuando el Gobierno lleva postergando la reforma de la financiación autonómica que reclaman las comunidades adscritas al régimen general, especialmente las más perjudicadas por este sistema, sin visos de una pronta solución.

El acuerdo alcanzado por PP y PNV tenía el éxito asegurado, como se ha confirmado este jueves, y todo a pesar de que se va a encontrar con una oposición del 10% en el Congreso. Ese es el porcentaje que suman los 32 diputados de Ciudadanos y los 4 de Compromís, que habían anunciado su voto en contra para mostrar su discrepancia tanto por la tramitación de urgencia del proyecto de ley y como por el hecho de que creen que fomenta la desigualdad entre comunidades. La formación que preside Albert Rivera incluso se ha referido al cupo como 'cuponazo', haciendo un juego de palabras con el conocido sorteo de la ONCE, para denunciar el 'regalo' que, bajo su punto de vista, le va a hacer el Gobierno al País Vasco.

Ningún otro partido se opondrá, y es que todos reconocen las figuras del Concierto, ya que los privilegios forales están avalados por la Constitución. Aunque sí se han producido críticas sobre el método de cálculo de las aportaciones al Estado.

A partir de ahora, el País Vasco tendría que pagar en torno a 1.300 millones de euros al año, aunque a esa cifra habrá que restarle los 344 millones de euros correspondientes a la transferencia de las políticas activas de empleo que el Ejecutivo regional gestiona desde el año 2011. Se trata de una competencia que Euskadi asumió durante la presidencia de Patxi López. Al mismo tiempo, el Gobierno irá descontando un porcentaje del cupo a abonar cada año, para cerrar la devolución de los 1.400 millones de euros antes mencionados, que los vascos dicen haber pagado de más, algo que se reconoce implícitamente con este reembolso.

Se empezará con un 10% este 2017 y se pasará al 15% en 2018. Para 2019 se ha acordado una rebaja del 20%, y para los dos siguientes del 25% y del 30% respectivamente, para acabar de cuadrar las cuentas en 2021.

¿CÓMO SE CALCULA EL CUPO VASCO?

La aportación del País Vasco mediante el cupo quedará modificada, de forma que Euskadi 'sólo' tendrá que abonar 956 millones de euros (tras descontar el dinero de las políticas de empleo) a las arcas del Estado. La aportación se calculaba hasta ahora de acuerdo al peso del Producto Interior Bruto (PIB) del País Vasco en el del conjunto del Estado, que se sitúa en torno al 6,24%, pero el problema es que esa es la cifra que se estableció en 1981 en función de los ingresos que tenía la población vasca en ese momento, y no se ha actualizado desde entonces, permaneciendo inalterable a pesar de que el PIB per cápita en la región tiene ahora más peso frente al del resto de España.

A partir de ahora Euskadi 'sólo' tendrá que ingresar 956 millones de euros al año en las arcas del Estado

El cupo, que se calcula cada cinco años, debe actualizarse además anualmente mediante la aplicación de un índice al importe fijado en el año base. Tal y como recoge la ley, para calcular los cupos “se constituirá una Comisión Mixta integrada, de una parte, por un representante de cada diputación foral y otros tantos del Gobierno vasco, y de otra, por un número igual de representantes de la Administración del Estado. El cupo así acordado se aprobará por ley con la periodicidad que se fije en el Concierto, sin perjuicio de su actualización anual por el procedimiento que se establezca igualmente en el mismo”. Pero el problema es que el acuerdo anual no se ha producido desde 2007, y por eso los vascos dicen haber pagado de más.

Hay que recordar que el Concierto Económico vasco nació tras la abolición foral, después de que acabase la II Guerra Carlista a finales del siglo XIX, como sistema de contribución de las provincias vascas a las finanzas del Reino de España. Ya en ese momento se reconoció a las Diputaciones Forales la facultad de recaudar sus propios impuestos a fin de hacer frente a los gastos propios y a los comunes del Estado.

De esta forma, el primer Concierto Económico se aprobó en 1878 y ha sido renovado sucesivamente hasta la actualidad con una única excepción: el período franquista, cuando se suspendió su aplicación en Vizcaya y Guipúzcoa hasta su recuperación en 1981. Álava fue la única que lo mantuvo en ese tiempo, en agradecimiento a su apoyo al Régimen. La última renovación del Concierto tuvo lugar en 2002, mientras que el cupo no se revisaba desde 2007.

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