- Los expertos habían proyectado inicialmente un crecimiento del 0,4%
- Se trata de la segunda revisión del dato, y las lo han incrementado
El PIB de Estados Unidos se expandió durante el cuarto trimestre un 1,4% en su tasa interanual, según ha informado este viernes el Departamento de Comercio. Un dato lejos del 2% con el que crecía la primera economía mundial años atrás, pero que disminuye los temores de recesión.
Así, EEUU ha revisado en cuatro décimas al alza el dato previo de febrero, que a su vez fue tres décimas superior a la primera estimación, que se había realizado el 29 de enero. Tras el dato difundido por el Departamento de Comercio de los últimos tres meses de 2015, se concluye que la economía creció un 2,4% a lo largo del pasado año.
EEUU ha revisado en cuatro décimas al alza el dato previo de febrero, que a su vez fue tres décimas superior a la primera estimación, que se había realizado el 29 de enero
La cifra del cuarto trimestre queda aún distanciado de las tasas de crecimiento superiores a los dos puntos con las que Estados Unidos se había recuperado de la recesión que sufrió tras la crisis financiera de 2008, pero también es bastante superior a las estimaciones que se manejaban a principios de año cuando la desaceleración China provocaba un regreso de los temores de deflación.
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DATOS POR ENCIMA DE LAS PREVISIONES
De hecho, a finales de febrero el consenso de analistas había proyectado una expansión de la producción del 0,4%.En este ocasión, los economistas consultados por Reuters esperaban que se situara en el 1%.
Junto al dato de PIB también se ha publicado el de gasto del consumidor, que representa más de dos tercios de la actividad económica de Estados Unidos, y que se sitúa en un 2,4% entre octubre y diciembre en comparación con el año anterior, muy por encima de la estadística preliminar que estaba en el 2%.
Se trata así de dos datos revisados al alza y que mejoran las previsiones de los expertos, días después de que algunos miembros de la Reserva Federal (Fed) hayan endurecido su discurso. El último ha sido el presidente de St Louis, James Bullard, que aseguró este jueves que la próxima subida de tipos "no puede estar muy lejos" después de la mejoría que se ha producido en el mercado laboral desde diciembre, cuando el banco central presidido por Janet Yellen situó los tipos en el entorno entre 0,25% y 0,5%.
Hay que tener en cuenta que en la última reunión el discurso del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) fue dovish, como se conoce en Estados Unidos al mensaje de la Fed cuando es pesimista. Señaló riesgos desde el extranjero, redujo las previsiones de crecimiento, y también la proyección de alzas de tipos para este año desde cuatro a dos. Así, podría haber un cambio radical de cara a la reunión que volverá a tener los días 26 y 27 de abril.
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