Muere Ivan Abadzhiev, considerado el 'Papa de la Halterofilia', a los 85 años

El considerado por muchos como el 'Papa de la Halterofilia' llevó a la selección búlgara a obtener 10 títulos olímpicos, 57 mundiales y 64 europeos en los 32 años que estuvo como entrenador principal de la federación búlgara.

Fue el encargado de hacer de la halterofilia el deporte más laureado del país balcánico. Como deportista en activo, dio a Bulgaria el primer metal internacional al acabar segundo en la final de la categoría de 67,5 kg en Teherán 1957.

Abadzhiev fue votado como el entrenador del siglo en su país natal. Introdujo una técnica de entrenamiento rompedora, basada en las sesiones de alta intensidad, que sigue vigente en la actualidad. Era conocido por el nivel de disciplina que demandaba a sus pupilos tanto fuera como dentro de las competiciones oficiales. Además de a Bulgaria, también fue el entrenador de otras selecciones internacionales, como la turca o la estadounidense, ya en la década de los 90.

A pesar del renombre de Abadzhiev, la halterofilia búlgara se ha visto envuelta en una serie de escándalos de dopaje en los últimos tiempos. Bajo el mandato del técnico, el equipo nacional se vio desprovista de las dos medallas de oro logradas en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988, después de descubrirse que los atletas que las obtuvieron estaban dopados. Sobre ello, dijo años después en una entrevista con un periódico que los éxitos de los halterófilos búlgaros "no estaban basados en los esteroides y el dopaje, sino en un trabajo enorme".