• Como de costumbre, Sergio Ramos apareció para igualar el marcador en el descuento
  • El Real Madrid reclamó dos penaltis y uno de ellos, el de Mascherano sobre Lucas en el minuto 13, pareció claro
Messi Cristiano

FC Barcelona y Real Madrid han empatado este sábado en el Camp Nou (1-1) en un Clásico apagado, lejos de los mejores duelos protagonizados antaño por ambos equipos, pero que tuvo lucha y épica sobre todo cuando Sergio Ramos igualó el marcador en el descuento, como hizo ante el Atlético para darle la 'Champions' a su equipo o en la última Supercopa de Europa, siendo de nuevo el salvador de un Madrid venido a menos que aprovechó la relajación final blaugrana.

Cuando parecía que el Barça iba a ponerse a tres puntos del Real Madrid en la tabla e igualar la lucha por el título, cuando todo hacía presagiar un 1-0, llegó el 'salvador' Ramos para, de cabeza a la salida de una falta que no debió cometer Arda Turan, rematar impecable. Dominó primero el Madrid, después el Barça se repuso y anuló a los blancos pero, con ese 1-0 de Luis Suárez y varias ocasiones perdonadas por los blaugranas, llegó el empate para poner las tablas y dejar todo tal y como estaba, con el Madrid 6 puntos arriba.

El dominio inicial del Madrid dio lugar a un Barça superior que se confió en exceso al final

Un final loco en el que el Barça vio como Casemiro sacaba sobre la línea un remate de Sergi Roberto. El Barça, que no hizo un buen partido, perdonó cuando no sentenció en sus mejores minutos, cuando realmente evocó al equipo blaugrana que venía dominando la última era. Y con la calidad y pundonor del Madrid, al que nunca se puede dar por muerto y menos si Sergio Ramos sube a rematar arriba en los minutos finales, llegó un empate que quizá hizo justicia a lo visto.

EL FC BARCELONA SE ADELANTÓ

No estaba cómodo el Barça pero dio un giro radical en su estilo, pues se adelantó en el marcador en una jugada de estrategia, arma históricamente más blanca que blaugrana. Justo tras la reanudación, en una falta lateral muy bien servida por Neymar, apareció Luis Suárez para adelantarse a Varane y rematar cruzado. El primer disparo limpio a portería del Barça acabó con Navas recogiendo el balón de su red, cambiando por completo el partido.

Además, con la entrada de Andrés Iniesta en el '59, ovacionado, el Barça volvió a asemejarse a aquel con el que la mayoría de barcelonistas se involucran e identifican más. Control, pases y triangulaciones cortas y rápidas, y una mayor presencia en el área rival que se tradujo en varias ocasiones para agrandar la diferencia en el marcador. Las más claras las de Neymar, que no atinó a rematar a portería tras buenas jugadas individuales, o un disparo del propio Iniesta a la red lateral.

Como de costumbre, Sergio Ramos apareció para igualar el marcador en el descuento

El cambio en el guión del partido fue claro tras el descanso, más aún en cuanto el Barça se puso por delante. El Madrid fue más peligroso durante el empate inicial que no cuando debía ir a buscar el empate. El Barça, en cambio, no se conformó con el 1-0 y, de hecho, la ocasión más clara de los últimos minutos fue para Leo Messi, que la cruzó demasiado. Sigue sin marcar el '10' en un Clásico desde la llegada de Luis Enrique al banquillo, y ya van cinco pulsos sin marcar.

Ni la entrada de Asensio ni de Mariano, autor de un 'hat-trick' entre semana ante la Cultural Leonesa en la Copa del Rey, parecieron dar aire y más vocación ofensiva a un Real Madrid que se fue apagando con el paso de los minutos, como si no se viera capaz de igualar el partido y menos de luchar por repetir el 1-2 del año pasado. Aún así, Sergio Ramos tuvo la suya de estrategia, de cabeza, justo antes de volver a rematar y, entonces sí, marcar para dejar congelado el Camp Nou.

ACCIONES POLÉMICAS EN LA PRIMERA PARTE

El Real Madrid reclamó dos penaltis y uno de ellos, el de Mascherano sobre Lucas en el minuto 13, pareció claro

Menos fútbol hubo en la primera parte, aunque entonces tuvo más peligro un Real Madrid camaleónico que se adaptó mejor al partido. Los de Zidane esperaron atrás para salir a la contra, pero también salieron jugando el balón con Isco o Modric, y presionaron alto y dieron velocidad al partido cuando quisieron. Más adaptados, tranquilos por esos 6 puntos de colchón, fueron cambiando de estilo para descolocar al Barça.

Dos ocasiones claras de Cristiano Ronaldo, en sendas acciones individuales una a la contra y otra tras recibir de Lucas Vázquez, más un cabezazo de Varane a la salida de un córner hicieron aparecer a Marc André Ter Stegen. El portero alemán tuvo trabajo, bien resuelto, mientras que Keylor Navas fue un espectador más pues el Barça, si llegó al área, no remató.

No obstante, la primera parte no estuvo marcada por esa falta de buen fútbol o de una mayor intensidad, sino por las acciones polémicas. El Real Madrid reclamó dos penaltis y uno de ellos, el de Mascherano sobre Lucas en el minuto 13, pareció claro. También el Barça se quejó de manos dentro del área de Ramos y de Carvajal, esta última muy dudosa pues el balón le dio en el brazo, desenganchado éste del cuerpo.

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