- Son productos bastante habituales en los hogares de medio mundo
- Los refrescos contienen altas cantidades de azúcar
Lo que se come se cría. Así reza el dicho popular que llama a las personas a tener cuidado con su alimentación, ya que de esto depende el buen funcionamiento del sistema inmunológico. Existen numerosos productos, bastante habituales en las cocinas de todo el mundo, que a pesar de su popularidad, no son tan saludables como se puede pensar.
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El portal Lifestyle se ha hecho eco de un estudio de la Harvard Medical School en el que se analizan los productos más habituales y las implicaciones que pueden tener en el sistema inmunológico de las personas.
1- Refrescos:
Estas bebidas suelen tener altos contenidos de azúcar, por lo que provocan que la eficacia del sistema inmunológico se reduzca solo 10 minutos después de consumirlos.
2- Carnes rojas:
A pesar de ser una delicia en buena parte del planeta, las carnes rojas inhiben la formación de linfocitos.
3- Café:
El café es una de las bebidas con mayor presencia en el mundo. Sin embargo, el exceso de su consumo reduce la capacidad del sistema inmunológico a la hora de hacer frente a las enfermedades.
4- Sal:
El consumo abusivo de sal se manifiesta en un aumento de las células de las enfermedades autoinmunes, por lo que el sistema inmunológico centra su actuación sobre tejidos sanos.
5- Lácteos enteros:
La leche posee Neu5Gc, una molécula que el ser humano no produce de forma natural y que las células terminan absorbiendo.
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