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Hace ya muchas sesiones que hemos comentado en distintos análisis que nuestra petrolera se ha vuelto a quedar a las puertas de superar la importante resistencia, los máximos históricos, en los 16,05 euros.
En las últimas semanas hemos comentado en varias ocasiones el hecho de que los títulos de Repsol se han vuelto a frenar ante la importante resistencia que presenta en los 16-16,05 euros, los máximos históricos (ajustada la serie de precios a todos los dividendos repartidos, así como a las ampliaciones de capital). De hecho el título lleva toda una década intentando dejar atrás, sin éxito, el nivel de resistencia de los 16 euros. En lo que se refiere al corto plazo tenemos a los títulos de la petrolera a las puertas del soporte que presenta en los mínimos de febrero (13,67). La perforación de este soporte le puede llevar a buscar la zona de los 13 euros, origen del último tramo impulsivo, los mínimos de julio. Mientras que por el lado de las resistencias vamos a fijarnos en los 14,82 euros. Un cierre por encima de esta resistencia, con holgura, sería una primera señal de fortaleza que dejaría las puertas abiertas a la posibilidad de intentarlo de nuevo con la fortísima resistencia de los 16 euros.
Pero mientras tanto lo cierto es que la fase correctiva sigue su curso. Si alguna vez fuera capaz de confirmar con holgura por encima de los 16,05 euros en velas semanales solo entonces tendríamos una fuerte señal de compra en la petrolera, pues se colocaría en subida libre absoluta.
