En un gráfico semanal de largo plazo es donde mejor podemos apreciar lo impecable del movimiento de los títulos de Dogi desde que volviera al parqué en junio de 2014.
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Si sólo nos fijamos en el movimiento lateral desde finales de noviembre veríamos (donde mejor se observa es en un gráfico diario) un movimiento lateral, a priori de consolidación (fase de reacción) que poco a poco se está estrechando más y más. En condiciones normales este tipo de movimiento suele tener implicaciones alcistas, pero es cierto que el precio se está acercando demasiado el vértice del triángulo, lo que de alguna manera puede invalidar la figura.
Pero como siempre me gusta decir hay que intentar mirar siempre las cosas con más perspectiva y para ello no hay nada como un gráfico semanal. Y si lo hacemos lo que podemos observar es cómo el precio se ha frenado, al tick, en la parte superior de un canal alcista que comenzó a dar forma en su último estreno en el parqué, allá por junio de 2004 (después de varios años suspendida). Por lo que salvo que ya se esté posicionado con anterioridad, en cuyo caso habría que tratar de colocar un stop profit, no creo que sea el momento de subirse al tren de las compras en este momento y con esto no quiero decir que no pueda seguir subiendo. Tan sólo quiero decir que después de subir más de un 700% desde los mínimos de 2016 (0,64) hasta los máximos de ese mismo año (5,474) hay que ser prudentes. ¿Por qué? Muy sencillo. Porque podría ajustar todo el impulso alcista y caer con fuerza sin dejar de ser por ello alcista. O lo que es lo mismo, todo aquél entre ahora deberá saber que si lo hace debería colocar un stop loss más que generoso.
(Gráfico semanal - Dogi)
