Telefónica ha visto negocio más allá de la telefonía e Internet: la televisión. La teleco se ha lanzado a reforzar su contenido televisivo en operaciones tan sonadas como la puja por distintos derechos deportivos o la adquisición de Digital Plus.
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La compra del 78% que le faltaba para controlar todo el capital de Digital Plus fue una oportunidad para la compañía que preside César Alierta. Prisa estaba ansiosa por vender y Telefónica tampoco tuvo oposición por parte de Mediaset, que acabó vendiendo su 22%.
¿Por qué este interés por la televisión? La televisión de pago es una forma de asegurar clientes para las telecos, mediante la oferta de paquetes en los que se sume a los servicios de telefonía e Internet.
Y no sólo Telefónica se ha dado cuenta, ya que esta práctica se está extendiendo a otros países de Europa, donde los operadores comienzan a entrar en el negocio de la televisión: BT Group se ha interesado por la adquisición de derechos deportivos (como ya está haciendo Telefónica), Liberty Global ha comprado la productora All3 Media y el operador belga Telenet ha entrado en el capital de una cadena local.
Incorporar una cadena podría ser el siguiente paso lógico para los operadores pero no es fácil ni barato. Además, el contenido exclusivo quedaría limitado por la propia rentabilidad de la producción televisiva, ya que estas empresas necesitan vender gran parte de su contenido para ser rentables. Por el contrario, poseer una cadena daría más poder al distribuidor a la hora de negociar derechos para contenidos de terceros.
La estrategia de captar clientes mediante ofertas que incorporen contenidos propios aún está en sus primeros pasos. Habrá que esperar para ver cuál es el siguiente paso de las telecos en el terreno del contenido audiovisual.
L.G.