• Círculos políticos afirman que el Gobierno tendrá que dar marcha atrás con las medidas

En el mes de junio la Seguridad Social cambió el criterio que aplicaba a los parados mayores de 55 años que no tuvieran prestación y seguían contribuyendo a la Seguridad Social por no ver disminuida su pensión -convenio especial-, dando la posibilidad de jubilarse a los 61 años. Aunque muchos de ellos afirman que se les estaría denegando esta medida por lo que tienen que seguir contribuyendo y no tienen acceso a la pensión hasta cumplir los 63 años.

fatima bañez

Como era de esperar el impacto no es el mismo para sindicatos que para el Gobierno. Dónde unos ven 130.000 afectados potenciales, los otros afirman que son 35.000. Desde el ejecutivo también afirman que no se trata de una situación dramática porque este tipo de parados están optando a la pensión máxima de 2.500 euros, por lo que eran empleados que disponían de un buen sueldo y que en muchos casos, se trata de la empresa que les despidió quien paga el convenio especial como parte del finiquito.

Tras el cambio de criterio de las decisiones algunos afectados han comentado que desde las oficinas de la Seguridad Social les comunicaron que tienen la orden de paralizar estas resoluciones o incluso de aprobar las solicitudes de jubilación tal y cómo se hacía antes de tomarse esta medida.

Por otro lado, un portavoz del Ministerio de Empleo desmiente que haya quedado en suspenso el criterio, y por el contrario la decisión es enviar una comunicación interna a las oficinas de la Seguridad Social para remitan todos los expedientes que lleguen a la Subdirección General de Prestaciones con el fin de centralizar la decisión y garantizar que el criterio uniforme es el que se está aplicando en todo el país.

CAMBIO DE PLANES

Personas cercanas al entorno político del Gobierno afirman que no habrá más remedio que dar marcha atrás como ya ocurrió con la tributación de las indemnizaciones por despido. Provocando un escándalo enorme en el cual los afectados van a ganar en los tribunales porque la medida les es desfavorable retroactiva, y matiza esta fuente a El Confidencial “incluso con tintes de inconstitucionalidad”.

AFECTADOS

Las personas que se han encontrado en ésta situación tienen un perfil muy parecido. Llevaban más de 40 años cotizados y alrededor de lo 55 son despedidos complicándose las posibilidades de reinsertarse en el mercado laboral. A parte, el problema se agrava un poco más cuando ven cómo su pensión que podía haber sido muy buena y con esa situación se verá reducida drásticamente sin poder mantener el poder adquisitivo en su retiro.

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