Lucy Kellaway, columnista de 'Financial Times', se ha planteado una cuestión muy interesante sobre los trabajadores que se mantienen durante mucho tiempo en una misma compañía: ¿Son mediocres o es la rutina la que les hace poco ambiciosos?
En una conversación con un recién graduado universitario que acababa de comenzar a trabajar para una prestigiosa compañía, éste destacó que había estado mucho tiempo escuchando a distintas personas de la empresa y que cuanto más arriba se encontraban en el escalafón más “parecían apagarse”.
Así, Kellaway considera que esto se deba a que las personas más brillantes “aprovechan” estos empleos en grandes compañías como campo de entrenamiento y trampolín. Asimismo, señala que “son simplemente mejores de lo que solían ser” y explica que no es que los “mediocres se queden, sino que al hacerlo se vuelven así”.
Finalmente, considera que no es que los ejecutivos sean menos brillantes que los recién graduados, sino que “no hablan entre sí y eso los hace ciegos a las fortalezas del otro”.
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