La ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social del Gobierno de España, Magdalena Valerio, ha presentado este viernes durante al rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros el Plan de Choque por el Empleo Joven 2019-2021 con el que el Ejecutivo espera reducir la tasa de desempleo del 33% actual al 23,5%.
Este plan tiene como objetivo, además, incrementar las contrataciones indefinidas entre jóvenes y mejorar su formación. Actualmente, de los algo más de 2,7 millones de jóvenes afiliados a la Seguridad Social, el 78% de ellos trabaja en el sector servicios, con una tasa de estabilidad del 8,19%, "de modo que la tasa de temporalidad es enorme", ha explicado Valerio.
Igualmente ha destacado que "tenemos 569.000 desempleados menores de 30 años, de los que 87.000 son de larga duración y el 72 % tiene un bajo nivel formativo". Con estos números que desdeñan una situación preocupante para el empleo joven, el Gobierno considera que se justifica así el plan integral.
La elaboración de este proyecto, dotado con 2.000 millones de euros, ha tenido un marcado carácter transversal, ha destacado la ministra de Trabajo, dado que en él han participado distintos ministerios del Gobierno de España. "Las personas jóvenes no es que sean el futuro, es que son el presente", ha destacado. "El empleo joven es precario, con una temporalidad muy alta, baja remuneración, y una brecha salarial del 50%", ha lamentado Valerio.
"No todos los jóvenes parten del mismo punto de partida, hay que remover muchos obstáculos par lograr la igualdad", ha dicho Valerio, que ha explicado que este plan contempla hasta 50 medidas para abordar esta problemática y que, para su redacción, el Gobierno ha contado con el apoyo unánime de UGT, CCOO y CEOE-CEPYME.
En España tenemos 569.000 desempleados menores de 30 años
Una de las medidas destacadas ha sido la creación de una red de 3.000 orientadores en los servicios públicos de empleo, que realizarán también tareas de prospección y captación de oferta, y cuyo perfil profesional se acordará en la primera Conferencia Sectorial tras la aprobación del plan. Una parte significativa de ellos proporcionarán atención individualizada a los jóvenes y realizarán un seguimiento del proceso de inserción laboral.
El plan también contempla un apoyo al Sistema de Garantía Juvenil con la incorporación de 110 mediadores juveniles que se coordinarán con los servicios de empleo autonómicos, que son quienes tienen las competencias en materia de empleo, para informar a los jóvenes de las medidas del plan y de los servicios que ofrecen las oficinas públicas de empleo y otros agentes del mercado laboral.
Entre otras medidas que se recogen en este proyecto, están recortar en un 20% la actual brecha de género entre hombres y mujeres jóvenes; incrementar anualmente en torno a un 15% el número de contrataciones indefinidas, alcanzando durante el conjunto de los tres años la cifra de 2,9 millones de contrataciones fijas, y conseguir que al menos un 43% de las personas jóvenes inscritas como desempleadas y que no disponen de titulación en Educación Secundaria Obligatoria adquieran mediante programas de formación las competencias en Lengua y Matemáticas.
