Woody Allen se defiende de las acusaciones de agresión sexual a su hija adoptiva, Dylan Farrow

Está en el ojo del huracán, pero no es la primera vez. En medio movimientos como Time´s Up o #MeToo y de la lucha contra casos de abusos sexuales por parte de profesionales de la industria del cine, el nombre de Woody Allen ha vuelto a saltar a la palestra. Las acusaciones de su hija adoptiva, Dylan Farrow, veían la luz hace cuatro años. En las mismas, la hija de la entonces pareja de Allen, Mia Farrow, confesaba haber sido víctima de tocamientos por parte del menudo director a la edad de siete años. Algo que ahora vuelve a acaparar titulares.

Greta Gerwing, Rebecca Hall, Thimotée Chalamet, Selena Gomez y varios intérpretes más han empezado a renegar de Woody Allen, confesando su arrepentimiento por haber trabajado con él y donando sus salarios a causas benéficas. Todo en solidaridad con Dylan Farrow. Frente a ellos, actores como Alec Baldwin no han dudado en situarse del lado de un director al que considera que se le está dando un trato injusto.

Así las cosas, el propio Woody Allen decidía salir al paso de las acusaciones con una carta clara y concisa.

“Cuando se hizo por primera vez esta demanda, hace más de 25 años, fue investigada a fondo tanto por la Clínica de Abusos Sexuales a Menores del Hospital de Yale-New Haven como por el New York State Child Welfare. Ambos lo hicieron durante muchos meses y concluyeron ambas que no hubo en ningún momento abuso sexual. En vez de eso, descubrieron que probablemente un infante vulnerable había sido entrenado para contar la historia por su enfadada madre durante una ruptura contenciosa.

El hermano mayor de Dylan, Moses, ha dicho que fue testigo de cómo su madre hacía exactamente eso, coaccionar sin descanso a Dylan, intentar convencerla de que su padre era un peligroso depredador sexual. Parece que ha funcionado, y, desgraciadamente, estoy seguro de que Dylan de verdad cree lo que dice.

Pero aunque la familia Farrow está usando cínicamente la oportunidad proporcionada por el movimiento Time’s Up para repetir esta alegación desacreditada, eso no lo hace más veraz hoy de lo que fue en el pasado. Nunca abusé de mi hija, como concluyeron todas las investigaciones hace un cuarto de siglo”.

Woody Allen