Cine de fusión. Así podríamos definir lo que Disney ha decidido hacer con “Rogue One: Una historia de Star Wars”. El primer spin-off intergaláctico se presenta el próximo mes de diciembre con la firme intención de convertirse en el mayor éxito cinematográfico del año, pero también con aspiraciones de demostrar que el universo creado por George Lucas es lo suficientemente rico como para construir nuevas historias al margen de las trilogías oficiales.
¿Cuál es la fórmula por la que han decidido apostar para ello? Pues, como ya sabíamos, muchos de los personajes de la trilogía original estarán en la película. Darth Vader o la versión joven de Han Solo irán cobrando protagonismo, pero, según acabamos de saber, también habrá alguna incorporación de la segunda trilogía de “Star wars”.
¿Os suena el Senador Bail Organa? Claro que si, ya que su papel en “El ataque de los clones” o “La venganza de los Sith” era más que importante. De hecho, se trata del padre adoptivo de la princesa Leia y del hombre que ayudaba a huir a Yoda tras su batalla con Palpatine. En la trilogía original no llegábamos a verlo nunca, ya que se supone que fallecía en el ataque de la Estrella de la Muerte a Alderaan. Lo que pasa es que los acontecimientos de “Rogue One: Una historia de Star Wars” nos llevan a los acontecimientos anteriores a “Una nueva esperanza”, por lo que el Senador Organa retomará su rol.
Pese a los rumores que suelen acompañar a este tipo de cintas, lo cierto es que estamos ante una participación confirmada, ya que el actor Jimmy Smits ha sido el encargado de confirmar su retorno durante una entrevista al programa de la CBS, The Talk. El 16 de diciembre será el momento de demostrar que la unión de generaciones funciona.