“Chicago” o la tendencia a sobrevalorar el cine musical

Siempre hemos dicho que la comedia o el terror son géneros denostados. Los premios siempre pasan por alto filmes de este corte, a pesar de que muchos bien merecerían honor eterno. La historia siempre es severa condenándolos al olvido. Una injusticia que, como suele pasar, es solo uno de los lados de la moneda. algo que queda muy claro en Chicago.

Sorprende que este musical de Rod Marshall haya sido tan aclamado y la similar Nine, denostada. Los defectos de Chicago son excesivos a toda vista. Más allá de los excesos ofrecidos en todo momento, la atmósfera y la puesta en escena resultan cargantes hasta lo alarmante. Vale que el director sabe como rodar un buen número musical y que Catherine Zeta-Jones está “on fire”, pero el exceso hace de Chicago un filme soporífero y, por momentos, difícil de disfrutar ante tanto desorden . Si quieres ahorrarte tiempo, puedes ver la primera media hora y multiplicarla por cuatro. Cualquier sorpresa a lo largo del sucesivo metraje es siempre para mal y además así te ahorras ver a Richard Gere tratando en el precario ejercicio de supervivencia que se marca.

Gravísimo caso el de Chicago, una cinta que incluso se llevó 6 Oscars y se impuso en la carrera a la Mejor Película a 4 auténticas obras maestras: El Pianista, El Señor de los Anillos: Las dos Torres, Gangs of New York y Las Horas.

¿Qué cuenta Chicago? La cinta narra la historia de dos mujeres del mundo del espectáculo que, tras asesinar a sus respectivas parejas, tratan de que su caso judicial sea el centro de atención tanto de la prensa de Chicago como de un prestigioso y apuesto abogado. La promesa de aventura y oportunidad que ofrece la Ciudad de los Vientos deslumbra a Roxie Hart, una inocente y extrovertida cantante que sueña con cantar y bailar para salir de su vida gris. Su sueño es seguir los pasos de oro de Velma Kelly, cantante de vodevil. Roxie consigue que su deseo se haga realidad cuando algunas actitudes equivocadas las hacen aterrizar a ambas, la estrella y la aspirante, en la prisión, a causa de distintos cargos por asesinato. Bajo el ladino cuidado de la guardiana Morton en la prisión, Roxie se encuentra con el legendario abogado Billy Flynn, quien acuerda hacerse cargo del caso por una suma cuantiosa. La carrera de Roxie explota, para mortificación de su mentor. Pero la inteligente Miss Kelly nos reserva algunas sorpresas para el segundo acto…

2 Comments

  1. Anónimo octubre 23, 2019
  2. Hugo octubre 24, 2019