Valencia no es la autonomía peor financiada

Juan Ramón Rallo

CapitalBolsa
Capitalbolsa | 16 ago, 2017 10:57
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Se nos suele repetir que España es un Estado de las Autonomías enormemente descentralizado. Incluso se les reprocha a muchos catalanes que aspiren a secesionarse cuando en la actualidad ya disfrutan de un ingente número de competencias propias.

Sin embargo, la descentralización es más aparente que real: no ya por las muchas potestades regulatorias de las que sigue disfrutando el Ejecutivo central, sino por el enorme grado de redistribución que existe entre los residentes de distintos territorios españoles. En este sentido, la queja (razonable) de muchos catalanes es que, si fueran independientes o gozaran de un mayor autogobierno en materia de ingresos, sus administraciones públicas disfrutarían de mucha más recaudación ya sea para bajar los impuestos a sus ciudadanos o para prestarles mejores servicios públicos.

Esta sensata queja contra la infrafinanciación de las administraciones públicas catalanas suele contrarrestarse con informes y titulares que deliberadamente buscan degradar su relevancia. Por ejemplo, este lunes se nos informó a bombo y platillo en toda la prensa nacional que la autonomía peor financiada de España era la Comunidad Valenciana (la cual recibía 2.178 euros por habitante ajustado, un 7,5% menos que la media del conjunto de autonomías), mientras que Cataluña estaría prácticamente en la media (2.312 euros por habitante ajustado, sólo un 1,8% menos que el resto de comunidades). Entonces, ¿a qué viene tanto lloro de muchos catalanes? ¡Si ya reciben prácticamente lo que les toca!

Por desgracia, nuestro sistema de financiación autonómico resulta tan complejo, enrevesado y opaco que tales razonamientos terminen siendo aceptados de manera acrítica por el grueso de la población. Y es una pena, porque ridiculizando las quejas fundamentadas del prójimo sólo dificultaremos el entendimiento y tensionaremos la cuerda. Permítanme en lo sucesivo que intente explicar por qué la Comunidad Valenciana no es la autonomía peor financiada de España y por qué, en cambio, Cataluña sí está ominosamente maltratada desde un punto de vista recaudatorio.

El sistema de financiación autonómico es el conjunto de reglas por las que cuales se determinan los recursos financieros con los que cuenta cada administración autonómica. Ya de entrada, conviene aclarar que este sistema no recoge la totalidad de las cargas o de los beneficios que obtienen, en términos medios, los residentes de cada autonomía por formar parte del Estado español: en particular, no contempla la redistribución interterritorial que efectúa el Estado central mediante su propio presupuesto. Por ejemplo, si el Gobierno central creara un impuesto extraordinario sobre los murcianos y repartiera tal recaudación entre los asturianos, esta transferencia de renta desde murcianos a asturianos no figuraría en las cuentas del sistema de financiación autonómico. Para obtener la imagen completa necesitaríamos acudir a un documento distinto al que se presentó el lunes: a saber, a las balanzas fiscales (al sistema de cuentas públicas territorializadas)... Leer Más

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