6 razones para cambiar de trabajo

Cuando el trabajo se convierte en un bien escaso, como en la actualidad, parece que plantearse la posibilidad de abandonar un puesto de trabajo no es la mejor de las ideas. Sin embargo, existen situaciones en las que dejar el trabajo tiene argumentos de peso, vamos a repasar hasta seis de estas situaciones.

Se trata obviamente de situaciones extremas, pero, que se dan en mayor medida de lo que podemos imaginar. Realmente, en estas situaciones la persona acabará planteándose de manera natural todas las posibilidades que pueda tener para abandonar su trabajo y buscar una ocupación nueva: otra cosa será si esto es realmente posible.

Razones para dejar el trabajo

Desplazamientos asesinos

El año pasado se publicaba una investigación realizada en Suecia en la cual se afirmaba que los desplazamientos largos de ida y vuelta al trabajo se encontraban en el origen de problemas o afecciones como la obesidad, la depresión, los problemas conyugales, el estrés, el insomnio… efectivamente es un problema grave, que puede afectar a la calidad de vida de la persona a niveles extremos y muy preocupantes por lo que, efectivamente, es un motivo para plantearse abandonar el trabajo.

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Estás desaprovechado

Este es un motivo para pensar en dejar el trabajo, pero, ojo, también es uno de los motivos que genera abandonos erróneos en una carrera profesional. La explicación es simple, cuando de verdad nuestras habilidades no se están aprovechando esto va a suponer un retroceso en el desarrollo de nuestra carrera profesional, pero, más allá, también influirá en aspectos personales como la autoestima y la felicidad. El problema estriba en el hecho de una percepción distorsionada de nuestras propias realidades en relación a la de nuestros compañeros o a la del entorno laboral, que nos puede llevar a sobreestimar las capacidades que poseemos y tomar decisiones erróneas: más habitual de lo que podemos creer.

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La empresa se hunde

Independientemente de las fidelidades o la solidaridad que como empleado podamos desarrollar respecto a los propietarios de la empresa, lo cierto es que no resulta muy recomendable en un proceso de hundimiento esperar a que caigan los cascotes encima. En estas situaciones la recomendación de comenzar a buscar trabajo cuando las señales comienzan es totalmente legítima.

Desanimo No crees en lo que haces y esto te influye de veras

Este punto también es relativo: resulta difícil generalizar ya que existen personas capaces de desarrollar tareas profesionales en entornos en los que no se sientan especialmente orgullosos de lo que están haciendo pero, tampoco sea un elemento que les influya en demasía en su vida personal. Sin embargo, cuando esto ocurre, cuando no se cree lo que se está haciendo y esto repercute por ejemplo en una merma del potencial o en una bajada de la autoestima, la influencia en lo personal puede ser muy nociva a largo plazo, y, justifica también la posibilidad de cambiar de trabajo.

Tu entorno de trabajo es tóxico

Trabajar en entornos hostiles obviamente tiene una repercusión directa en la salud, todas las investigaciones al respecto muestran que las personas que trabajan en este tipo de entornos son más propensos a morir antes que quienes lo hacen en ambientes más favorables. No sólo esto, el hecho del conocimiento de desarrollar tareas en entornos hostiles provoca alteraciones muy frecuentes como la depresión o el estrés.

No hay equilibrio entre tu trabajo y tu vida personal

Para la gran mayoría el trabajo no es otra cosa sino uno de los caminos por los que tratamos de obtener un objetivo mucho más relevante, nuestra vida personal y familiar salvaguardada y protegida. La realidad muestra de manera preocupante la fractura que crecientemente esta abriéndose entre la vida familiar y la vida laboral; en una de las últimas encuestas realizadas al respecto el Reino Unido el 55% de todos los empleados decía no tener tiempo para sí mismo, el 67% de los padres decía no tener tiempo suficiente para dedicar a sus hijos y el 63% de los casados declaraba no tener tiempo suficiente que dedicar a su cónyuge…

Obviamente es una cuestión extendida, que hace difícil justificar el abandono de un puesto de trabajo, pero, cuando esto afecta a limites tan profundos como el deterioro del ámbito familiar debe ser tenido en consideración como un elemento que nos haga reflexionar sobre nuestras posibilidades laborales fuera del entorno que realmente nos está perjudicando tanto.

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